Alemania vendió hoy 4.090 millones de euros en bonos a cinco años con un interés del 1,11% y una fuerte demanda, un resultado que demuestra que la seguridad de la deuda germana aún resulta atractiva para los inversores.
La rentabilidad media de la subasta ha superado ligeramente el 1% alcanzado en la anterior colocación de similares características celebrada en noviembre, mientras que la demanda ha superado holgadamente a la de aquella ocasión, cuando el ratio de cobertura apenas llegó a 1,5 veces. En la de hoy, las peticiones han superado en 2,1 veces lo ofertado.
El Bundesbank retuvo el 18,2% de la subasta, en línea con su política de mantener en torno al 20%. Hace dos semanas, el banco central se vio obligado a retener el 40% de una colocación, porque los bajos intereses ofrecidos desanimaron a los inversores.