Unicredit, el mayor banco italiano, anunció hoy unas pérdidas de 10.600 millones de euros en el tercer trimestre frente al beneficio que esperaba el mercado de 7.400 millones. La entidad, que fue suspendida de negociación, regresó a la Bolsa de Milán con unas caídas del 9%. Además, despedirá al 12% de su plantilla en Italia en los próximos años, medida que afectará a 5.200 trabajadores y suspende el dividendo de este año.
El banco se ha visto obligado a acometer la mayor ampliación de capital que han visto los mercados italianos en los últimos dos años, justo cuando más desconfianza genera la economía del país, tras la salida de Silvio Berlusconi como primer ministro y la formación de un gobierno de tecnócratas dirigido por el ex comisario europeo Mario Monti.
Según los datos de los test de estrés realizados el pasado mes de junio por la Autoridad Bancaria Europea, Unicredit tiene las mayores necesidades de capital entre todos los bancos italianos, lo que le obligará a levantar fondos para alcanzar en junio un ‘core capital’ del 9%. Precisamente, necesita 7.400 millones según este organismo, justo la cantidad que pedirá a los mercados.