Italia se encuentra en el punto de mira de la especulación financiera. Hay voces que apuntan a que el país sigue la senda de Grecia y, desde luego, la prima de riesgo de su deuda aporta solidez a estas afirmaciones: 480 puntos básicos contra el bund alemán. La prima de riesgo griega era, el 5 de abril de 2010 (un mes antes de su primera petición de rescate), de 346 puntos básicos. Sin embargo el problema no se reduce a la zona del euro. En Wall Street los analistas están cada vez más nerviosos debido a la interconexión entre el Viejo Continente y la primera potencia del mundo.
El afamado columnista financiero John W. Schoen explica en un artículo publicado por Msnbc.com (que es el portal digital asociado a la cadena NBC News y su canal hermano CNBC) que el riesgo que supone Italia para EEUU pasa por los bancos. «La mitad de los bancos estadounidenses han concedido créditos a los bancos europeos», asegura este analista citando a la propia Reserva Federal de EEUU (Fed).
Por lo tanto, el núcleo del problema no es la deuda soberana directa que las entidades estadounidenses pudiesen tener de los países periféricos, y en especial de Italia y de Grecia. El problema, según Schoen, es que si Italia exige un rescate, siendo como es la tercera economía de la zona del euro, toda la región va a resentirse de manera preocupante. En particular Francia y Alemania.
Schoen argumenta que la capacidad de aislamiento de los bancos estadounidenses, dadas esas circunstancias, sería relativa. «Las economías de EEUU y Europa son las dos más grandes e interrelacionadas del mundo, y por lo tanto ésa es también la proximidad entre ambos entramados financieros», comenta este experto en su artículo, que ha titulado «Si Roma arde, EEUU sufrirá un calor agobiante».
De hecho, las grandes agencias de rating ya han advertido a Francia de que cualquier otro gasto excesivo de ahora en adelante -bien por rescatar a Italia, bien por tener que recapitalizar sus bancos tras una quita de deuda griega- podría poner en cuestión su máxima calificación crediticia. Es decir, que la deuda gala podría perder la triple A.
La CNBC es la cadena de referencia en Wall Street. Además, las opiniones de Schoen encuentran una base argumental en el hecho de que la deuda emitida por el Tesoro a diez años ha saltado de un interés del 1,75% a principios de octubre hasta el 2,03% actual.
En cuanto a Italia, el problema no es sólo económico. El país mediterráneo atraviesa desde hace unas semanas una crisis política muy grave que podría conllevar la salida del poder del primer ministro Silvio Berlusconi de un modo u otro. De hecho, esta tarde el Parlamento italiano decidirá si Berlusconi sigue al mando o no. Y los medios de comunicación locales no lo dan por hecho. Ayer los mercados celebraron los rumores de dimisión del mandatario y la Bolsa de Milán cerró con subidas superiores al 1,3%, pero existe un fuerte grado de incertidumbre sobre quién podría sucederle.