La Comisión Europea ha abierto una investigación a Samsung por el supuesto uso indebido de las patentes justas, razonables y no discriminatorias (“Frand” por sus siglas en inglés) para prohibir la venta de productos competidores, en concreto, los de Apple.
Las patentes denominadas “Frand”, como por ejemplo el 3G o el WiFi, se rigen según ciertos términos legales que permiten a las compañías compartir conocimiento dentro de la industria y trabajar para desarrollar tecnologías y estándares abiertos, para garantizar la competencia leal en el mercado.
Por ello, la Comisión ha comenzado una investigación antimonopolio contra Samsung. En caso de ser considerado culpable, el fabricante coreano podría verse obligado a retirar varias de sus denuncias contra Apple, no sólo en Europa, sino a escala global, en las que alegaba la infracción de su patente de 3G por parte de la empresa de Cupertino.