Telefónica, Vodafone y Orange han pagado al Estado 1.622 millones de euros para repartirse casi todo el espectro de la telefonía móvil. Ono, Jazztel, Euskaltel, R y Telecable, que han pagado en su conjunto otros 25 millones, se han hecho con frecuencias regionales. El resultado de la subasta no ha cubierto las expectivas del Gobierno, que esperaba recaudar como mínimo 2.000 millones.
Aún así los 1.646 millones de euros han supuesto una revalorización del 13,31 % sobre el precio global de salida de todo el espectro subastado que era de 1.452 millones de euros, y un 30,8 % más sobre los bloques que los operadores han pujado.
Telefónica ha obtenido cinco bloques de frecuencias (70 MHz en total) en la subasta llevada a cabo por el Ministerio de Industria, lo que le permite disponer de espectro en todas las bandas atribuidas a servicios móviles. El nuevo espectro conseguido supondrá para la compañía una inversión de 668 millones de euros, a pagar en dos plazos, septiembre 2011 (53%) y junio 2012 (47%). El período de concesión del mismo se extiende hasta el 31 de diciembre de 2030.
Vodafone ha obtenido 60 megahercios (MHz), con una inversión de 518 millones de euros, que le permitirá ofrecer a sus clientes servicios de internet móvil de última generación en todo el país, incluyendo las zonas rurales.