La oposición política peruana no ha perdido tiempo en la crítica contra Ollanta Humala. Antes de que asuma la presidencia el próximo 31 de julio, el mandatario se enfrenta a denuncias tan serias como la realizada por el parlamentario ‘fujimorista’ Rolando Sousa, que le acusa de “tráfico de influencias”. El motivo no es otro que una presunta reunión de Alexis Humala, hermano del líder de Gana Perú, con el vicepresidente de Gazprom y el ministro de Exteriores ruso. Por el momento, el político nacionalista ha asegurado que la noticia no es cierta.
La historia ha corrido como la pólvora y muchos ven ya en la familia Humala una nueva certificación de que la corrupción es un mal que lo abarca todo en Perú. Sin embargo, los líderes de Gana Perú se mostraron sorprendidos por la historia y aseguraron desconocer que tal reunión se hubiese producido. A su vez, Humala sostuvo que lo publicado “no es cierto y por respeto a las autoridades estadounidenses y por el hecho de encontrarme en este país no hablaré del tema ahora”. Por el momento, las correcciones del partido y su líder, a la espera de que éste regrese de EEUU, no ha servido para mucho.