La intención de Francisco Cascos de frenar el proceso de fusión de Cajastur con Caja Cantabria y Caja Extremadura choca contra una ley aprobada por el Gobierno de Aznar cuando el propio Cascos era ministro de Fomento, según han señalado a EL BOLETÍN fuentes del sector financiero.
La Ley de Medidas de Reforma del Sistema Financiero, aprobada en 2002, establecía el principio de “irrevocabilidad” de los consejeros de las cajas, según el cual los miembros de los órganos de gobierno de las entidades no pueden ser revocados de sus puestos hasta que finalicen su mandato. Con esta medida se intentaba añadir estabilidad a las cajas precisamente ante el temor de que un vuelco electoral en autonomías y ayuntamientos provocase un cambio abrupto en los consejos y acabase afectando al negocio de las entidades.
Tras la celebración de las elecciones autonómicas, en las que Foro Asturias fue el partido con mayor representación parlamentaria en la región con 16 de los 45 escaños en disputa, Cascos abogó por “reconducir” el proceso de integración de Cajastur, que calificó de “expolio inadmisible y dañino”.