El órdago del Banco de España ha revitalizado a los mercados financieros españoles. En una sesión en la que tanto Wall Street como el resto de grandes parqués europeos atascaban su remontada, el Ibex 35 destacó al frente de las subidas con avances superiores al 2,5%. Gracias al empuje de la banca el selectivo recuperó la cota de los 10.000 puntos.
La decisión del regulador gobernado por Miguel Ángel Fernández Ordóñez de difundir los resultados de las pruebas de resistencia a la banca, que miden su capacidad para soportar condiciones extremas en los mercados, ha forzado a la UE a hacer lo mismo y ya hay ganadores. Santander y BBVA van a poder presumir de ser los bancos más preparados ante las adversidades de Europa, un hecho que quedó hoy plasmado en la Bolsa.
Ambas entidades lideraron hoy las ganancias del índice paneuropeo Eurostoxx 50. BBVA se disparó más de un 6%, mientras que el Santander avanzó un 4,5%. En el parqué madrileño, el resto de valores financieros se sumaron al carro de las fuertes subidas, algunas incluso por encima del 11%, como en el caso de Bankinter.
En este escenario, el presidente del Santander, Emilio Botín cargó contra la creación de la tasa bancaria que acordaron ayer aprobar los líderes europeos para financiar los costes de las futuras crisis. “Me parece muy mal”, afirmó Botín a las preguntas de los periodistas en Huelva, porque tal y como recordó “Banco Santander, al igual que otros bancos, han hecho bien sus tareas y no han tenido necesidad de ayudas públicas”.
En EEUU, Citigroup ha elaborado un informe sobre el impacto que tendrá la reforma financiera en los bancos estadounidenses y sitúa a Goldman Sachs como el más afectado. Según sus cálculos el impacto sobre BPA normalizado será de un 23%, seguido por Morgan Stanley (20%), JP Morgan (18%) y Bank of America (16%).
Sin embargo, el mercado pareció ignorar este informe y las acciones de Goldman Sachs se apreciaban más de un 1,5% tras la apertura de la sesión. Las acciones de Citigroup cedían un 0,7%.
191 puntos
La fiesta también llegó a los mercados de deuda. La prima de riesgo española cayó un 12% y dejó atrás los 200 puntos básicos. La rentabilidad del bono español retrocedió hasta el 4,646% frente al ‘yield’ del 2,732% del bund alemán. A primera hora de ayer, el riesgo país alcanzó sus máximos desde la introducción del euro, por encima de los 230 puntos básicos, pero luego retrocedió ligeramente por la tranquilidad que aportó la subasta de bonos a largo plazo celebrada por el Tesoro.