La economía de la eurozona se estancó en el cuatro trimestre de 2009, según la segunda revisión que ha hecho Eurostat y que deja en papel mojado el leve avance del 0,1% que arrojaba el dato adelantado hace unas semanas. El nuevo dato se conoce después de que algunos de los países de la región también revisaran a la baja sus primeras proyecciones. En Holanda, el crecimiento no fue tan alto, al pasar de un positivo 0,3% a un 0,2%. La recesión en Italia resultó ser más profunda de lo que se esperaba, con una caída del PIB del 0,3%, una décima más de lo anunciado.
Mientras Grecia intenta superar su delicada situación financiera, algunos analistas también miran con recelo a Italia. La deuda soberana de este país alcanza, como en Grecia, el 115% del PIB. Su economía se contrajo un 5% el año pasado (una de las mayores caídas de la zona del euro) y se prevé que apenas crezca este año.
Italia tiene una calificación de A+, cuatro escalones por debajo de la ‘triple A’, que conservan una pequeña lista de países (EEUU, Alemania, Francia, Reino Unido y Canadá). Moody’s y Ficht también incluyen a España en este grupo, pero no S&P que rebajó hasta AA+ su calificación a principios de 2009, el primero en perder su rating desde el estallido de la crisis financiera. S&P también ha amenazado al Reino Unido.
La recuperación económica registrada por las principales economías durante el tramo final de 2009 ha perdido fuerza en los primeros meses de este año, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que dibuja un panorama aún más desalentador para Alemania, cuyo PIB se contraerá un 0,4% en el primer trimestre. Si se cumplen las previsiones de este organismo, la economía alemana será la única que sufra un decrecimiento entre las siete mayores economías mundiales.
El conocido como ‘Club de los países ricos’ presentó hoy en París sus nuevas previsiones de crecimiento del PIB para el G-7 para las que augura un crecimiento agregado del 1,9% en el primer trimestre de 2010 y del 2,3% entre abril y junio, por debajo de la expansión del 3,7% observada en el último trimestre de 2009.
“Aunque apreciamos signos alentadores de una mayor actividad, la fragilidad de la recuperación, la precariedad del mercado laboral y las posibles dificultades procedentes de los mercados financieros subrayan la necesidad de ser prudentes a la hora de retirar las medidas de apoyo”, señaló el economista jefe de la OCDE, Pier Carlo Padoan, quien advirtió de que a pesar de que las condiciones financieras hayan mejorado considerablemente, los bancos “siguen siendo vulnerables a las pérdidas de crédito”.
En concreto, las nuevas proyecciones del organismo internacional auguran un crecimiento anualizado del PIB de EEUU del 2,4% en el primer trimestre y del 2,3% en el segundo, frente al 5,6% registrado entre octubre y diciembre de 2009; mientras que en el caso de Japón, los pronósticos apuntan a una expansión del 1,1% y del 2,3% en los primeros trimestres de 2010.