El mexicano esgrime que FCC mantiene una posición más pesada en la inmobiliaria, por lo que es la constructora la que sigue ejerciendo el control. Carlos Slim ha alcanzado finalmente el 30% de Realia. A pesar de este nuevo incremento de cartera, el magnate ha rechazado lanzar otra OPA para hacerse con el control de la inmobiliaria, una opción que ha caído como un jarro de agua fría sobre las expectativas de muchos inversores y ha apartado a la compañía del rebote de la Bolsa.
Realia ha cerrado así la jornada bursátil de este martes con una caída del 0,74%, a contracorriente de un Ibex 35 que en algunos cruces ha llegado a sumar más de un 2% arriba. La retirada de los inversores de perfil más oportunista que se habían prometido otra e inmediata lluvia de millones por parte del inversor mexicano ha sido la causa la que apuntan los analistas como motivo de este comportamiento bajista que ha dejado su gráfica en los 0,675 euros por acción.
Si bien el umbral alcanzado tras la ampliación de capital de la inmobiliaria forzaría la formulación de una OPA, Slim se escuda en dos argumentos para evitar esta operación. En primer lugar, apunta en una comunicación remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que, a pesar de que controla ya un 30,3% de la cotizada, FCC mantiene un peso mayor en su capital social, pues alcanza un 36,8%. En segundo lugar, el hecho de que se trate de una situación transitoria consecuencia de su esfuerzo por asegurar el éxito de la emisión de nuevos títulos mediante la que prepara su saneamiento financiero definitivo.
En este sentido, el magnate mexicano relata al supervisor español que la superación del umbral del 30% es consecuencia directa de la asunción de su parte en la ampliación de capital más aquellos títulos que se habían quedado sin adjudicar. Una situación que, mediante pequeñas colocaciones en Bolsa podría revertirse y que, de momento, tampoco activaría el vencimiento automático de deudas de la inmobiliaria, pues efectivamente FCC sigue manteniendo una participación mayor en su capital social y por tanto no podría considerarse un cambio en la titularidad de control.
La ampliación de capital efectuada por Realia fue por 89 millones de euros. El objetivo fue la obtención de recursos para atender uno de los cuatro tramos en los que recientemente reestructuró su cartera de deuda. El primer vencimiento al que debe hacer frente la cotizada tendrá lugar el próximo 29 de enero.