La tecnológica ha anunciado un débil desempeño para el conjunto del ejercicio y provocado una estampida inversora que en parte parece haber encontrado destino en la alcista Red Hat. El balance de cuentas publicado por SanDisk este jueves ha caído a plomo sobre su gráfica en Wall Street. El fabricante de memorias USB y otros dispositivos informáticos se hunde más de un 17% como si sus cifras hubieran provocado el formateo del valor de muchas carteras de inversión.
El impacto de su último trimestre fiscal va más allá y la compañía tecnológica ha recortado sus previsiones para el conjunto del ejercicio sin atreverse a especificar cuantía alguna. Sí que se conoce que la anterior proyección marcaba ingresos por entre 6.500 y 6.800 millones de dólares, rango que ya se quedaba lejos de colmar los 7.230 millones que había vaticinado el consenso de mercado. Para el trimestre en curso, la cotizada ha reducido sus perspectivas de facturación en 100 millones de euros.
En sentido inverso amanece la gráfica de precios de Red Hat, que suma más de un 7% a su gráfica. Los inversores de la Bolsa de Nueva York se lanzan a por acciones de la proveedora de software abierto después de que su beneficio a cierre de su ejercicio fiscal alcanzase los 47,7 millones de dólares. Las ganancias ajustadas alcanzaron los 43 centavos por acción, mientras que los expertos habían augurado un máximo de 41 centavos.
